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Mostrando las entradas con la etiqueta filiación divina

Aniversario de la canonización de san Josemaría Escrivá

Hace ya 15 años, el 6 de octubre del 2002, san Juan Pablo II canonizó a Josemaría Escrivá de Balaguer. En la Audiencia del día siguiente resumió el carisma del nuevo santo con estas palabras: “Estaba convencido de que, para quien vive en una perspectiva de fe, todo es ocasión de encuentro con Dios, todo es estímulo para la oración. Vista de este modo, la vida cotidiana revela una grandeza insospechada. La santidad aparece verdaderamente al alcance de todos”. La posibilidad de ser santos en la vida ordinaria convierte la cotidianidad en una aventura original. Ya no es posible la monotonía, pues cada instante es ocasión de encuentro con Dios y de servicio a los demás. El Señor sale al encuentro de sus hijos una vez más, ofreciéndonos la posibilidad de amarle a través de nuestras actividades normales de cada día: familiares, profesionales, ciudadanas, solidarias… Todo lo que hacemos, si está impregnado del amor de Dios, si ha sido ofrecido al Señor, es ocasión de encuentro con nuestr

La oración en el huerto

El Evangelio de san Marcos dice que, después de la última cena, Jesús fue con ellos a un huerto, llamado Getsemaní (26,36). En arameo esta palabra significa “prensa de aceite”, por lo cual se intuye que en ese lugar se procesaban las olivas cosechadas en los alrededores. Se trata de un pequeño rincón del valle del Cedrón, al oriente de Jerusalén, en la base del monte de los Olivos (Díez, 2010,148). San Lucas añade que Jesús lo visitaba con frecuencia para orar cuando se encontraba en la Ciudad Santa: se encaminó, como de costumbre, al monte de los Olivos (22,39). Costumbre de orar. El Señor nos da ejemplo de piedad frecuentemente: antes de los grandes acontecimientos, como la elección de los Doce, pasa la noche en oración; al hacer milagros, el Evangelio lo muestra en diálogo con su Padre. Ahora, en la recta final de su paso por la tierra, también es modelo de plegaria: Y dijo a los discípulos: «Sentaos aquí, mientras voy allá a orar». ¡Qué importante es dedicar unos

Santa María, Madre del Amor Hermoso

Celebramos un nuevo aniversario del inicio del trabajo apostólico del Opus Dei entre las mujeres y de la fundación de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz. Y en la Prelatura se festeja, por disposición de la Santa Sede, la fiesta de Santa María, Madre del Amor Hermoso. Por eso escribió san Josemaría que Nuestro Opus Dei nació y se ha desarrollado bajo el manto de Nuestra Señora. Ha sido la Madre buena que nos ha consolado, que nos ha sonreído, que nos ha ayudado en los momentos difíciles de la lucha bendita para sacar adelante este ejército de apóstoles en el mundo. Pensad que ha sido la gran protectora, el gran recurso nuestro desde aquel 2 de octubre de 1928, y antes. Hablemos con el Señor en esta oración sobre nuestra Madre, suya y nuestra. Para este diálogo de amor nos pueden servir los textos de la Misa de María, Madre del Amor hermoso, que son espléndidos. Ya desde la Antífona de entrada le aplicamos las palabras del Cantar de los cantares (6,10): Todo es hermoso y ag

El Padrenuestro, oración de hijos

Camino de Jerusalén, san Lucas aprovecha para enunciar las principales enseñanzas de Jesucristo: después de la parábola del buen samaritano y de la acogida del Señor por parte de Marta y de María, presenta al Maestro en una actitud que a los discípulos les impresionaba especialmente (11,1): Una vez que estaba Jesús orando en cierto lugar… El Señor les da ejemplo de diálogo con el Padre. Toda la Sagrada Escritura es cátedra de oración: en el Antiguo Testamento aparece desde las primeras páginas, en el dramático diálogo del Señor con Adán y Eva, antes y después del pecado original. Pero, como dice el Catecismo, «la oración se revela sobre todo a partir de nuestro padre Abraham» (n.2569). Un ejemplo de la oración de este patriarca aparece en el capítulo 18 del Génesis (vv.20-32). Antes había acogido a Dios en Mambré, y había recibido la promesa de la concepción de su hijo Isaac. Ahora el Señor le anuncia el castigo para las ciudades pecadoras de Sodoma y Gomorra. Y Abraham

La Transfiguración del Señor

Celebramos hoy un misterio de la vida de Cristo, que también conmemoramos todos los segundos domingos de cuaresma: la Transfiguración del Señor. Tanto en oriente como en occidente se celebra el seis de agosto, cuarenta días antes de la fiesta de la Exaltación de la Cruz (catorce de septiembre), aludiendo a una tradición según la cual la Transfiguración ocurrió cuarenta días antes de la crucifixión. La primera lectura (Dn 7,9-14) presenta la escena del juicio final. Aparece la figura del Hijo del Hombre, cuyo reinado no tendrá fin, y que el mismo Jesucristo se aplicará a Sí mismo: Durante la visión, vi que colocaban unos tronos, y un anciano se sentó; su vestido era blanco como nieve, su cabellera como lana limpísima; su trono, llamas de fuego; sus ruedas, llamaradas (…). Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él. Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y len

Filiación divina y abandono en la Providencia

Hace una semana meditábamos sobre el amor al prójimo, como una de las principales enseñanzas del “cuerpo” del Sermón del Monte. Hoy continuaremos en ese discurso, en una sección que nos habla sobre la confianza en el Padre: no estéis preocupados por vuestra vida: qué vais a comer; o por vuestro cuerpo: con qué os vais a vestir. Se trata de dos preocupaciones básicas del ser humano: la comida para la vida y el vestido para el cuerpo. Pues bien, en la línea “escandalosa” y en apariencia paradójica del Sermón del monte, el Señor nos enseña que debemos confiar siempre en nuestro Padre Dios: ¿Es que no vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?  Nos hace ver que hemos de mirar en qué consiste lo importante: no en las apariencias exteriores, sino en lo interior: en la vida, en el cuerpo, más que en el alimento o en el vestido. En 1998, el entonces Cardenal Ratzinger recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Navarra. Entre las actividades académicas s